LENGUAJE Y PODER

Pese a lonnegable de la relación entre lenguaje edeología, y quizá precisamente por lo estrecho de ésta, no resulta en absoluto fácil de analizar, y mucho menos si lo que tratamos de poner en evidencia es el modo en que la mismadeología determina el discurso didáctico en relación con el sentido y las formas que ha de adoptar la enseñanza de las lenguas en cada momento. Más allá del debate sobre si se debe enseñar gramática o no, sobre cómo se enseña a usar la lengua o sobre los enfoques que se van presentando como más adecuados, lo cierto es que la presencia cada vez mayor de personas de otras lenguas y otras culturas en las aulas obliga a análisis y, sobre todo, a propuestas, más comprometidas con el sentido ético de la educación lingüística. En este trabajo repasamos muy brevemente las relaciones entre lenguaje edeología y las que se establecen entredeología y enseñanza de las lenguas, para llegar así a una propuesta didáctica de revalorización de la multiplicidad cultural

En este artículo tenemos como objetivo fundamental promover la reflexión sobre las conexiones entre enfermedad y comunicación, y sobre la manifestación de tales conexiones en nuestros centros educativos, especialmente en la clase de lengua. Tras exponer algunasdeas en torno a lo que significa lanterpretación crítica de los textos y a propósito también de las áreas denterés propias de los estudios sobre salud, enfermedad y comunicación, nos detendremos, en la segunda parte del trabajo, en el análisis de la representación discursiva de algunas de las características fundamentales de la enfermedad en los diccionarios de la RAE y en algunos medios de comunicación escrita.

El discurso de los medios de comunicación de masasnvade en la actualidad las sociedades contemporáneas y se ha convertido no sólo en un lenguaje ajeno al lenguaje convencional y al orden de la letra, sino también en un sistema de poder y de opresión que construye un ecosistema comunicativo en el que el flujondiscriminado de lanformación exalta lo efímero y londividual y diluye lo público dificultando así el ejercicio de la ciudadanía. De ahí que una de las tareas de la educación sea la de vindicar las culturas cotidianas de las mayorías y posibilitar a las sociedades apropiarse, desde esas culturas, de los nuevos saberes, lenguajes y escrituras que ofrece el actual vértigo audiovisual con su espectáculo demágenes,maginerías emaginarios.

Con once años o más de alfabetización formal los estudiantes deberían demostrar notorios avances en la escritura ortográfica. Sin embargo, unanvestigación desarrollada con estudiantes universitarios de los primeros semestres demuestra que tal presupuesto es erróneo y que muchos presentan en sus textos argumentativos -reseñas, artículos y ensayos- rasgos ortográficos típicos de niños de educación básica. En este trabajo se llama la atención urgente parancluir en educación superior, dentro de programas de alfabetización académica, un eje curricular dedicado al tema ortográfico.

Lanvestigación didáctica de orientación cognitiva y sociocultural de la escritura ha ofrecido a los docentes referencias teóricas y prácticas. Las respuestas a las necesidades comunicativas permiten a la vez el refuerzo de los procesos cognitivos del aprendizaje. Al explicitar los procesos se da sentido a lanstrucción requerida.